La corrosión localizada por picaduras fue estudiada en alambres de aluminio expuestos a dos ambientes: marino-costero y rural-urbano, con Microscopía Electrónica de Barrido.

La corrosión por las picaduras fue evaluada utilizando conceptos de geometría de fractales y autosimilaridad.

La distribución de picaduras obedece una ley de potencias cuyo exponente de autosimilaridad comprende entre 1.7 y 1.9.

La corrosión de aluminio fue más pronunciada en un ambiente marino-costero en comparación con el rural-urbano.